Me imagino como se rodó en el cementerio de Granátula de Calatrava, pequeño pueblo situado a unos 10 kilómetros de Almagro. Hace unos días aluciné en este camposanto en el cual un ejército de mujeres enlutadas abrillanta las lápidas del cementerio en un soleado día de viento. Volver es el film más manchego del director en el cual recupera sus raíces y la memoria de su madre. Aquí habla del culto a la muerte en los ambientes rurales. Aquí en mi pueblo también convive la idea de la muerte sin que sea un elemento trágico, se lleva con naturalidad. 
Es increible estar en uno de los lugares donde se rodó Volver, una magnífica película del exquisito Almodovar.
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